Muere un trabajador del servicio municipal de limpieza aplastado por una máquina barredora

Eduardo Landeta Largo, vecino del barrio barakaldes de Zuazo de 44 años de edad, trabajador de los servicios municipales de limpieza de Bilbo, gestionadas por la multinacional Fomento de Construcciones y Contratas, se sumó ayer a la larga lista de accidentes mortales ocurridos en Euskal Herria. Es el décimo trabajador que muere en accidente laboral en Bilbo el presente año.

El trabajador falleció aplastado por una máquina barredora con la que trabajaba. Según informaron fuentes del Ayuntamiento de la capital vizcaina el accidente ocurrió en la calle Ripa, en el barrio de Abando, sobre las 11.30 cuando, por causas que investiga la Policía Municipal, la máquina cayó encima del operario y le aplastó la cabeza. Una primera hipótesis que baraja la Policía en su investigación apunta a que el trabajador podría encontrarse revisando el motor de la máquina barredora cuando fue aplastado por ella.

El trabajador fue encontrado poco después malherido en la calzada y el personal sanitario que se desplazó al lugar del accidente, trató sin éxito de reanimarle en el mismo lugar del accidente.

Han tenido que fallecer 10 trabajadores en la villa para que los portavoces municipales realicen sus primeras declaraciones. La portavoz del grupo municipal de IU en el Ayuntamiento de Bilbo, Julia Madrazo, mostró su profundo pesar por el accidente laboral mortal y transmitió «su más sincero pésame» a la familia de la víctima con la que se solidarizó a través de un comunicado.

A pesar de la responsabilidad del gobierno municipal en la seguridad de los trabajadores que realizan servicios municipales, la representante de IU se limitó a asegurar que «velará por el estricto cumplimiento de las medidas de seguridad en el trabajo». Cabe destacar que el fallecido trabajaba para la multinacional Fomento de Construcciones y Contratas, empresa que tiene subcontratada el servicio de limpieza de la villa.

Con este accidente son ya 105 las muertes en accidente laboral en Euskal Herria en lo que va de año. Cabe subrayar que ocho de ellos eran vecinos de Bilbo. Así y todo, no se ha producido reacción institucional alguna.